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Inglaterra. El equipo rojo abrió la temporada ganando.

Luis Díaz comenzó la temporada con un título. El colombiano fue titular y jugó 89 minutos con el Liverpool, que venció 3-1 al Manchester City y se coronó campeón de la Community Shield.

Esta copa es el primer trofeo oficial que se entrega en la nueva campaña del fútbol inglés, enfrentando al campeón de la Premier League (Manchester City) y el ganador de la FA Cup (Liverpool).

En el duelo de dos delanteros recientemente contratados, Darwin Núñez superó a Erling Haaland en su primer enfrentamiento en el marco de la centenaria edición de la Community Shield, la Supercopa de Inglaterra.

Suplente de inicio, el impacto del goleador uruguayo ya es notorio en el conjunto de Jurgen Klopp, que lo puso en juego en el minuto 59, en sustitución de Roberto Firmino. Después falló una ocasión ante Ederson, pero en el tramo final sacó un penalti de un cabezazo que no iba a ningún lado más que fuera de no ser por la mano de Ruben Dias y marcó el 3-1 con el que su equipo se adueñó del título.

El lateral derecho Alexander-Arnold expresó una de sus variadas cualidades ofensivas con descaro, pero también con fortuna: el tiro que lanzó de primeras desde el borde del área con el interior del pie derecho, tras una jugada que fue de un lado a otro hasta la dejada de Mohamed Salah, pintaba bien, pero no tanto como el desvío definitivo de la cabeza de Nathan Aké. Fue el 0-1. Minuto 21. Un golpe previsible para el City, irreconocible hasta entonces.

En el City ingresó en el segundo tiempo Julián Álvarez. El argentino debutó con el Manchester City en la recomposición de Guardiola en el ataque (mantuvo a Haaland y sustituyó a Grealish y Mahrez por Foden y Álvarez), cuando la inercia con la que terminó el primer tiempo se frenó tras una nueva ocasión de Mahrez. Julián Álvarez aprovechó su ocasión. En su primera oportunidad, en un rechace, cuando Adrián no logró atrapar ni a la primera ni a la segunda en su pugna con Foden, cuando menos merecía el City el 1-1, él lo consiguió.

No entendió el árbitro que hubiera falta de Foden sobre Adrián, por más que lo reclamó el guardameta, que había sido uno de los mejores del Liverpool hasta entonces, hasta que el encuentro repuso el empate a poco más de cuarto de hora del final, cuando menos se intuía, cuando Klopp observaba más controlado el duelo y cuando el Manchester City se sentía ya capaz de todo. Un error. Un espejismo.

En el minuto 81, el cabezazo que conectó Darwin Nuñez iba fuera, pero en su camino se encontró la mano de Rubén Días. Despegada, no la vio en un primer momento el árbitro. Sí después, cuando recurrió al VAR para señalar una pena máxima clara. Marcó el penalti. Salah lo transformó con la izquierda, raso, lejos del alcance de Ederson.

Ya definitivo para el título, sentenciado con el 1-3 de Darwin Núñez, ya indispensable en el Liverpool. El charrúa remató de cabeza desde el área chica tras un pase de Andrew Robertson.

Estos clubes ahora se alistan para debutar en la Premier. El Liverpool el sábado (6:30 a.m.) visitará al Fulham, mientras que el City el domingo (10:30 a.m.) jugará en casa del West Ham.